viernes, 4 de noviembre de 2011

Sara: "Quería un vestido de noche largo y no parecer una mesa camilla"

Un número bonito el 111, si no llevase la palabra kilos detrás. Nacida en  Barcelona, con 24 años y 164 de estatura, eso fue lo que llegó a pesar Sara, una chica a la que le encanta el maquillaje, la cocina y su pelo (antes de que, por error, acabara cortito).

"Antes entraba, cogía madalenas y salía, ahora odio que la comida me salga mal y no cocino nada que no pueda comer".

En la actualidad Sara pesa 68 kilos, lleva ya un tiempo con el mismo peso pero no se da por vencida. Le falta muy poco para alcanzar el normopeso y, casi cuatro años después de empezar, está a punto de conseguirlo.



¿Qué fué lo que te animó a empezar?

Semanas antes el que no me entrase la ropa y que tuviera que gastarme un pastizal en tallas grandes. Además tenía una boda y quería un vestido de noche largo, no quería parecer una mesa camilla.


¿Por qué el cuatro de diciembre?

Era lunes. Me dieron esa fecha que la tenían libre.

Entonces... fuiste a un endocrino, ¿te puso una dieta, o te enseñó a comer bien?

Enseñar lo que se dice enseñar... no. Me dió una hoja donde ponía lo que tenía que comer, con la dieta y ya está.

¿Cúanto perdiste?

23 kilos en 8 meses.

¿Por qué lo dejaste?

Me cansé... dejé de bajar. Me puse a comer lo que no debía y engordé 9 kilos. A los seis meses decidí volver al endocrino y hacer a veces la dieta de la piña. Seguí teniendo caídas, bajaba, subí 6 kilos más, bajaba 4, subía otros 6... y en febrero empecé la dieta dukan, con 77,3 hasta el día de hoy.

Cuéntame las ventajas y desvantajas de la dieta Dukan desde tu propia experiencia...

Lo mejor que bajas rápido (si no estás estancada como yo), que puedes hacer muchas recetas que dan el pego para no aburrirte. Lo peor que no te la puedes saltar porque sino el rebote esmuy grande.

Y, por último, cuéntame, después de 41 kilos menos, cómo es tu vida, en qué acambiado y en qué has cambiado tu.

Que me cabe la ropa de tiendas normales. Antes me daba igual cómo ir. Ahora miro más por como me quedan las cosas. Puedo andar más sin cansarme y, aunque aun tengo vergüenza por todo, alguna cosa ya no me da tanta.

¿Algunas imagénes para ver tu cambio?

Sí, pero que no me salga mi cara ¿eh? que, como dije antes, hay cosas que aun me dan vergüenza... jajajaja



Gracias Sara

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